I
Haciendo un recuento de amistades y de lo que han sido aquellas relaciones he llegado a la conclusión de no estar segura si he hecho bien las cosas. No veo nada de malo en las lejanías sin razón, o en las amistades de pocos encuentros. Es necesario hacer entender a los demás que uno como amigo siempre está, aunque los ojos no se crucen tanto como uno quisiera.
Cuando alguien empieza a caminar más rápido yo dejo que avance. Cada uno elige el ritmo que quiere y obligar a otro a quedarse creo, no es lo mejor. Si desea volver, bienvenido sea. Eso cuando no hay problemas de por medio, cuando estar lejos es algo natural y no la salida obligada. Caen lágrimas, lamentos y arrepentimientos.
Las opciones son:
1.-tragar la amargura, masticarla y seguir
2.-revolcarse en la pena y las culpas
3.-hacer como que nada pasó.
La primera es vivir el dolor y aprender. Volver o esperar sin rencor.
Lo segundos, quizás lo menos sano y lo más terrible. No salir nunca del problema.
Lo último, creo que es imposible que pase en un relación de verdad.
Las amistades de verdad, intervenidas con problemas, se arreglan y no importa el tiempo que tome esto. Pasa porque existió amor de esos que se notan, y porque el cariño nunca se va. Reparar el error, nena.
Lejanías y problemas, se arreglan con esfuerzo. Y este es el mayor problema de las distancias. El hecho de que algunos seamos mas "quedados" que otros. De que algunos por orgullo esperen la acción de la otra parte, el "perdon" por una situación natural. Las personas cambian y me duele el estómago pensar que la gente crea que eso es algo malo.
Siento que no he hecho las cosas bien porque pienso que muchos esperaron que yo insistiera a que siguieran mi paso, pero no lo hice porque ellos quisieron doblar o seguir más rápido. Vuelvo a decir, que es imposible obligar a otro a quedarse. Por lo menos yo, no estoy acostumbrada a eso.
II
Todavía me enojo cuando veo algun parche o mochila que diga NO TE COMAS A TUS AMIGOS. Nunca he tomado once con una vaca, tampoco he mantenido una larga conversación con un cerdo. Mas que por "amistad" es un asunto de respeto.
By: Cindy (Valeria) Vidal (Montt) | sábado, 30 de junio de 2007 at 14:31 | |
Habia escrito algo y me acordé que no hay que exponer tanto. Asi es que lo borré y sigo con mi estudio de noche de domingo.
By: Cindy (Valeria) Vidal (Montt) | domingo, 24 de junio de 2007 at 18:47 | |
Las razones para que un mal día no sea tan malo como debería ser:
1.- La sopaipilla en meiggs.
2.-El buen resultado del trabajo de taller.
3.-Recordar el día de la pequeña gigante.
4.-Recordar que mañana quizás vea un incendio.
5.-Que me llamen por teléfono desde el infierno.
6.-Que ya no me duela la muñeca.
7.-Haber comido un tercio de golden nuss grande.
8.-Que mi pieza no esté tan desordenada.
9.-Pensar en que en un par de minutos más voy a escuchar a The Get Up Kids en volumen 30.
10.- Saber que estos días feos aparecen cada vez con menos frecuencia.
11.- Entender que es buena la existencia de estos días, ya que luego sabemos diferenciar entre éstos días y los otros. Así se aprovechan mejor.
By: Cindy (Valeria) Vidal (Montt) | jueves, 21 de junio de 2007 at 18:28 | |
Conocí a Firefox por mi hermano, y menos mal que me lo presentó. Si nunca le hubiese hecho caso aún sería una fiel usuaria de Explorer, que horror.
Mis razones son varias, y como estoy desde la Universidad escribiendo utilizando EXPLORER, no las voy a exponer ahora porque no soporto no ver pestañas ni mi propia configuración. No soporto que las páginas web se vean tan horribles.
Odio a explorer por muchas cosas, pero por sobre todo porque es feísimo.
By: Cindy (Valeria) Vidal (Montt) | miércoles, 20 de junio de 2007 at 11:14 | |
La gente acostumbra a pensar en el tiempo. A sacar cuentas y celebrar. Pensar en cuanto es lo que queda, en cuanto pasó. En los meses que 1 se demoró en enamorarse de 2 para luego dejarlo y encontrar a 3.
Ni la intensidad ni la verdad dependen del tiempo. Y no es que una cosa me importe más que la otra. Tengo presente el tiempo, y por eso es que prefiero no perder segundos pensando en él. Porque se que un minuto significa restar otro, y la verdad es que me gusta más sentir que contar.
By: Cindy (Valeria) Vidal (Montt) | martes, 19 de junio de 2007 at 20:56 | |
Dentro de tres semanas tengo el primer exámen de piano y hoy, en un día de lluvia tuve la idea de estudiar. Maldito el segundo en que me di cuenta de que el libro de estudio no estaba dentro de mi mochila. Lo peor es no recordar si lo guardé después de ocuparlo cuando lo saqué en la sala el día de ayer. Parece que no. Obvio, porque sino lo tendría acá. No lo guardé y espero que mis compañeros que se quedaron cuando yo me fui de la sala de piano número 5 lo hayan guardado. Ay.
By: Cindy (Valeria) Vidal (Montt) | jueves, 14 de junio de 2007 at 10:34 | |
He estado media hora tratando de hacer una especie de introducción a lo que quiero decir y nada resulta, asi es que comienzo la historia tal cual pasó.
Una compañera de la universidad se va a confirmar, ella es bien católica. Un tanto desesperante. El asunto es que me comentó algo su madrina de confirmación y yo no pude evitar plantearle mi duda sobre qué es lo que hace una madrina o un padrino de confirmación. La respuesta es simple. Esta persona es quien debe guiar durante las crisis de fé en la vida. Y está bien, la gente cristiana también son personas y deben tener sus crisis existenciales, donde todo es cuestionable pero con la gran diferencia de que están bajo la mirada de un ser superior llamado Dios y que está establecido que éste debe provocar temor y respeto hacia los creyentes, asi es que las crisis de fé deben ser terribles. Le pregunté que cual podía ser la causante de una crisis y me dió ejemplos. Una amiga de ella quería dejar de creer porque se murió alguien muy cercano, esto podía ser un castigo de dios. Me da escalofríos pensar en que la gente realmente sienta eso. De ahí nació la típica discusión, y yo no sé si a los cristianos no les gusta contra argumentar o simplemente no tienen nada que decir. Quizás sólo sea eso, y no porque no sepan pensar sino porque derechamente yo no puedo entender porque no estoy dentro. Si me dicen que alguien deja de tener fé porque alguien se murió, yo pienso que los católicos actuan por conveniencia.
Me fui del tema principal. Lo que quiero destacar es la labor de la madrina de confirmación. Considero que la fé es algo totalmente personal y que la persona creyente debe ser capaz de entender que es el único que puede estar seguro de su fé, de su cristiandad, y el único que puede reafirmarla. Es como cuando me di cuenta de que en medio de un estado depresivo el único capaz de darse ánimo es uno mismo y no quiero parecer consejera espiritual o experta en autoayuda, pero cuando las personas no damos cuenta de esto nos cambia todo. TODO.
Creo que si fuese parte de la iglesia católica dejaría la embarrada y sería la mejor cristiana porque antes que creer en un dios y en la voluntad de "él" voy a creer en mi, y la dependencia de mi fé respecto a otras personas, a otras imágenes y a situaciones específicas se iría a la mieda. Mi fé sería la más linda porque sería independiente. Bah, ojalá las cosas fuesen así. Menos mal que dios no existe para mi, ni para los mios.
El problema de las letras es que nunca sé si la gente me va a entender como yo quiero. La percepción y los errores que conlleva este gran problema.
By: Cindy (Valeria) Vidal (Montt) | miércoles, 13 de junio de 2007 at 15:03 | |
Me cuesta hablar después de ver una buena película o de presenciar un buen show. Es como si quedara en algún estado de shock, no sé. Pero me quedo pensando y no puedo decir nada más aparte de que fue un momento bonito. También pienso en lo extraño que es, que de un segundo a otro lo que vi o escuché, ya es un recuerdo. Y quedo nerviosa, callada. Es una especie de bloqueo mental. Recuerdo una vez que tuve una noche triste en la que no recuerdo casi nada, y todo por eso, un bloqueo. De repente me quedé en blanco y todo fue tan fuerte que nunca más recordé lo que dije esa vez. Quizás las películas y las músicas son un colapso de felicidad que me provocan el mismo tipo de bloqueo pero de distinta fuente.
By: Cindy (Valeria) Vidal (Montt) | domingo, 10 de junio de 2007 at 11:29 | |
Le dicen Villa El Llaverio, pero yo no sé si alcanza para eso. Parece que Villa es para un lugar con más casas y acá no deben haber más de cincuenta. Todo es normal. La gente camina, en el verano los niños juegan y la juventud tiene como punto de encuentro la esquina de mi pasaje. Hay árboles y siempre cambian los guardias. Hace diez años hubo una ola de robos en las casas, pero nunca uno a mano armada o algo así. Hay vecinos que son amigos, y señoras copuchentas. Quiebres matrimoniales y gritos para quien quiera escuchar. Una vez a la salida de la Villa hubo disparos y llegó uno adentro de la casa de la esquina (la verdad es que no sé si eso pase en todas partes :S).
Todo es tan normal que hasta han existido niños vendiendo limonadas como en las películas gringas, lo único que falta son niñas exploradoras vendedoras de galletas, espero que nunca existan. A veces hacen fiestas, asados y celebraciones familiares. Conflictos entre vecinos también, y como olvidar la música que se escucha. Hay bandas metaleras, existió la infaltable banda de convers de Nirvana y como no, la de covers de Chancho en Piedra. Todo lo anterior se ve en todas partes, pero hoy algo llamó mi atención. En un árbol se escuchaban pájaros... pero no eran cualquier pájaro. Eran loros. Loros como si fuese palomas. Cuatro loros arriba de un árbol. Loros verdes emitiendo sonidos de loro. L O R O S. La normalidad se me fue a la mierda, cambiemos la palabra normal por lo común.
(En la foto sale uno de los loros, UN LORO!).
By: Cindy (Valeria) Vidal (Montt) | lunes, 4 de junio de 2007 at 15:43 | |
Casi siempre cuando me bajo del metro y subo las escaleras para salir a la calle, tengo el pase escolar en el bolsillo de lo que lleve como abrigo. Mi mano lo toma y empiezo a imaginar lo que podría pasar. Que de la nada lo tomo y justo voy pasando por esas rejillas que hay en las calles, se me suelta de la mano y el pase escolar queda para siempre allá abajo. Luego viene lo peor, pienso en cómo lo puedo hacer para sacarlo, y que si no puedo de donde voy a sacar plata para irme a mi casa. Y que después voy a tener que pagar trescientos ochenta pesos en la mañana y luego en la tarde, si es que no me voy en horario punta. Que un nuevo pase escolar se demora mucho. Saco cuentas y me desespero. Después me acuerdo que no me está pasando nada de eso, guardo el pase y lo que tenga en los bolsillos en la mochila, y sigo caminando. Lo peor ya pasó, y lo mejor es que este día el pase no se me cayó.
Otras veces estoy en casa y siento que el perro ladra, los perros ladran. Y ahí me imagino lo mejor. Espero que no sea un gato al que tratan de espantar, menos que sólo sea la sombra de los árboles. Podría ser una persona, y pienso en la música adecuada, en algo que podríamos comer, una películas quizás. Ordeno la pieza un poco y miro por la ventana. Era un gato, o simplmente, nada. Y ahi viene lo peor, cuando uno ya no quiere utilizar tanto la imaginación.
Eso de crear situaciones, la queen.
By: Cindy (Valeria) Vidal (Montt) | sábado, 2 de junio de 2007 at 7:25 | |
De alguien que no coma sopaipillas requeteamarillas de la calle,
de alguien que no sepa que los mejores pañuelos desechables están en los puños de los polerones.
De alguien que sienta que las películas son una perdida de tiempo,
de alguien que crea que comer es un error y el chocolate, un pecado.
De alguien que no se atreva a cruzar la calle corriendo, aunque sea con luz verde.
De alguien que crea que la ropa usada un sólo día es considerada ropa sucia.
De alguien que no sepa reir con estupideces, o que no quiere hacerlo para no parecer estúpido.
De alguien que me tome de una mano y me deje sin ella.
De alguien que no me escucha cuando no hablo.
De alguien que no haya venido de la nada en la madrugada sólo para insinuarme con aquel gesto que le agrada esta compañía.
De alguien que piense que las cosas son de una forma y no existe otra.
De alguien que camine rápido cuando hace frío.
De alguien que en un abrazo de 3 momentos, sólo en el segundo apriete fuerte.
De alguien que me deje pasar antes porque cuando pequeño le enseñaron que eso había que hacer.
De alguien que piense constantemente en que la vida es una mierda y no hace nada para por lo menos, creer lo contrario.
De alguien que no sepa que los gritos y saltos no son motivo de verguenza.
De alguien que no me deje tomar de su brazo cuando caminando vamos conversando.
De alguien que no entienda que existen silencios inmensamente cómodos.
De alguien que piense que estar triste es algo malo.
De alguien que no me cobre por besos.
Eso creo hoy.
Pero en realidad, que lo crea no quiere decir que no vaya a pasar.
Y uno no se da ni cuenta.
Hoy, lo importante es todo lo contrario a lo anterior.
By: Cindy (Valeria) Vidal (Montt) | viernes, 1 de junio de 2007 at 19:29 | |
Lo que más me gusta del día después de la lluvia es el frío y los colores, el cielo azul.
By: Cindy (Valeria) Vidal (Montt) | at 15:02 | |